Para Ketu
1.
El tema de los llamados niños Abikú no sólo es bastante delicado, sino muy debatido e incluso incomprendido, como resultado de la falta de información que profundice en sus orígenes y en su verdadera razón de ser…
Hay quienes afirman que los también conocidos como Niños que nacen para morirno existen, pero si se toma el asunto con seriedad y se investiga con paciencia se puede encontrar una serie de conceptos alrededor de ellos, desde diferentes perspectivas, las cuales en su conjunto nos proporcionan una particular cosmovisión sobre la vida y la muerte*…
En la religión de los Orishas sus practicantes repiten hasta el cansancio que la palabra Abiku significa “nosotros nacemos para morir” (no entraré en mayores aclaraciones etimológicas sobre esta palabra ya que no es el objetivo de este texto, así que tomaré dicha interpretación como válida para los fines que este texto pretende), pero debemos reconocer que en un principio nacer para morir suena contradictorio, pues todas las personas vivas tarde que temprano debemos fallecer, más para el caso que nos ocupa la connotación va más allá y se refiere a los niños que a lo mucho vivirán hasta la pubertad…
Cuando una mujer embarazada se registra ante Ifa (es menos común que se consulte al padre en estos trances), o si es el caso de que su bebé ya nació, al hablar de que la criatura es Abikú y está condenada a morir se está actuando de una manera irresponsable, pues es obligación del Babalowo determinar a qué se refiere esa condición: si es el bebé un nacido para morir o si lo que sucede es que viene acompañado de un Abikú: no es lo mismo…
2.
Entrar al debate de si existen los niños Abikú en algún momento es lo de menos: sobre el tema se ha escrito mucho, obteniéndose por lo mismo opiniones completamente diferentes, llegando incluso algunas a ser contradictorias (se puede navegar en la web para ello, pero recomiendo precaución al creer en todo lo que se lea)… más en realidad la esencia de los conceptos que se quieran manejar depende de la fe religiosa o espiritual que el opinante y/o el creyente posea…
Independientemente de las connotaciones que a ello se le quieran atribuir, una interpretación completa de ese destino en la Osha e Ifa por lo regular no incluye el motivo u origen por el cuál un niño nace para morir a temprana edad…
En términos generales se señala que ser un niño Abikú es resultado de la necesidad de completar el ciclo karmático de la reencarnación inmediata-anterior, otros afirman que puede ser producto de la presencia de un Eggun obsesor (aunque hay quienes responsabilizan a un demonio menor) y unos más dicen que forma parte del aprendizaje de los padres, sin embargo, existen otros extremos como los que apuntan a que se trata de una maldición, que se está ante el tramposo cambio de cabeza por cabeza (maña común entre Santeros y Babalowos) o que todo consiste en las leyes del karma-darma…
Los practicantes africanos de Ifa piensan que el deseo de partida de un niño Abikú obedece a la necesidad de reencontrarse con la otra mitad de su alma, haciendo caso a la creencia de que antes de nacer ésta se divide en dos: una parte se queda en el cielo mientras la otra es la que reencarna (ojo con dicha teoría) y debería controlar su comportamiento para que al momento de la muerte, la parte que haya vivido le entregue buenas cuentas al que estaba en el cielo (¿?) y en su conjunto ello hable de una correcta evolución mutua para la siguiente reencarnación…
Otra creencia en aquel continente señala que los Abikú son espíritus malvados que habitan en un cielo especial al cual, a manera de fraternidad, sólo pueden acceder ellos (algunos dicen que se trata de un bosque bastante inaccesible), y son los encargados de matar a los recién nacidos, apoderándose espiritualmente de ellos desde que son fetos, a través de un constante ir y venir, en el que el origen de esta actitud es provocar sufrimiento a los vivos…
Por desgracia este tipo de conceptos hace creer a muchos Santeros y Babalowos que tras ciertas ceremonias se puede romper el vínculo entre los niños los Abikú con el mundo de los espíritus (por ejemplo, colocando una cadena en el pie izquierdo), o en el caso extremo, como sucede también en África, se opta ridículamente por marcarles el rostro o desmembrar el cadáver del niño una vez muerto**…
En todos los orígenes que se puedan enlistar para tratar de explicar lo anterior destacan dos que tienen toda la lógica milenaria para darlos como válidos: uno, si el niño es Abikú es porque nace con un Eggun como resultado de un aborto previo de la madre precedente al nacimiento de bebé vivo… o dos, por la condición de un destino previamente seleccionado…
3.
Un aspecto derivado del primer argumento, y sin entrar en actitudes moralistas, obliga a señalar que el aborto es un asesinato si las causas no son naturales, en consecuencia tenemos una alma resentida a la que no se le permitió nacer y por lo mismo es casi seguro que quede pegada a los padres para hacerles la vida imposible, ocasionalmente al padre si fue quien la convenció para interrumpir la gestación, pero quien realmente padece la venganza es la madre, pues haya sido por decisión propia o por presiones finalmente era la que tenía la última palabra y por lo mismo fue la principal responsable por haber terminado con la vida del producto…
Si bien este tipo de Abikú son tremendos asesinos de almas infantiles o jóvenes, a quienes sonsacan para no nacer, morir durante la gestación o en su caso mantener una actitud apática ante la vida, también existen otras consecuencias que son poco tomadas en cuenta (resultado del alma abortada), pero que forman parte de los problemas que puede enfrentar aquella persona responsable del aborto: les trancan los caminos, generan pesadillas nocturnas, enfermedades y bloquean su desarrollo económico y espiritual…
Existe una consecuencia aparentemente menos grave, pero no por ello deja de impactar de manera determinante en la vida de la persona que haya decidido interrumpir esa vida: los Abikú pueden condenarlos no sólo a la soltería, sino a la absoluta soledad, alejando todo tipo de posible relación sentimental o incluso de amistad y en general en la vida social…
Alguien se ha preguntado por que casi siempre que en una relación hay un aborto, la pareja termina por separarse?... algunos piensan que todo se reduce a que el aborto se convierte en un fracaso insuperable, otros creen por el recuerdo de dolor no pueden seguir juntos, algunos más afirman que la pérdida del bebé termina también por romper algo en la relación, pero nadie se ha puesto a pensar que es el mismo Abkiú hace todo lo posible porque la pareja no siga junta hasta que consigue distanciarlos para siempre…
Como sea: todo matrimonio (o la mujer por su cuenta), que haya vivido la terrible situación de un embarazo inconcluso, debe preguntarse por qué es tan complicado que ella se vuelva a embarazar… y es por ello que aunque las causas del aborto hayan sido naturales, no se puede dejar sin ponerle atención a esa alma frustrada… pero ese importante tema se abordará más adelante…
4.
El segundo argumento se refiere a la posibilidad de que el niño Abikú sea resultado de un karma (destino), y de ser este el caso debemos diferenciar dos posibles orígenes…
La primera posibilidad tiene una raíz profunda y mucho se puede explicar partiendo de la premisa de que las familias son exclusivamente producto de linajes, o lo que es lo mismo, el origen y destino de un grupo de almas es reproducirse cíclicamente en una sola estirpe, por lo que la llamada ascendencia y descendencia es resultado de un reciclado número de reencarnaciones…
Sé que muchas creyentes en la Osha e Ifa no son muy afectos a esta explicación (obvio, algunos religiosos tiene una fe recalcitrante en principios que en ocasiones no entienden, pero que repiten como loros porque forman parte de la sabiduría popular), pero para bien o para mal soy testigo de que uno de los padrinos de mi linaje religioso lo percibió, vivió, consultó y confirmó cuando descubrió en su hijo más pequeño una serie de tics, movimientos y comportamientos típicos de su fallecido padre: la respuesta definitiva la dio el propio Orunmila cuando confirmó que el alma de su hijo era la de su mismo progenitor…
Dicho de esta manera: en términos karmáticos el clan familiar encuentra su destino unido de una forma tal que el objetivo de dicho grupo es la evolución espiritual (hay quienes afirman que la premisa de ello obedece a que en su conjunto tienen deudas espirituales a pagar), y obviamente, su más grande enemigo son ellos mismos, por eso es que en ocasiones la muerte prematura de los bebés o los abortos suelen ser una constante en el árbol genealógico…
La segunda eventualidad es más flexible frente a las creencias de la Osha e Ifa, ya que ser Abikú está vinculado a cuestiones de destino individual: cuando un niño nace en esa condición es porque karmáticamente dejó algún pendiente en su última reencarnación inmediata-anterior, motivo por la cual en la presente sólo deberá completar aquellos aspectos aplazados aunque esa manera de saldar cuentas con el pasado implique penosas enfermedades, drásticos accidentes, ultrajes físicos, abandonos, muertes violentas o los ya citados abortos…
* recomiendo leer el libro "El camino hambriento" del escritor africano Ben Okri, todo un tratado de cómo son malévolamente perversas las almas de los niños fallecidos en contra de los hermanos que pugnan por nacer en una misma familia...
** esta práctica fue asumida a partir del siglo XVII por los oscurantistas de los países bajos en Europa, en la cual aquellos a quienes en vida se les había acusado de ser Vampiros, ya muertos sus cuerpos solían ser desmembrados y sus partes enterradas en lugares separados, o en el caso más drástico se les cortaba la cabeza y esta era quemada… posteriormente en los terrenos de la brujería negra se adoptó la creencia de la descuartización y entierro de las extremidades lejos una de la otra, cuando el odio del vivo por el fallecido y/o asesinado busca dificultar su siguiente reencarnación…